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makumba

Genesi´s rules (final)

Genesi´s rules (final)

Entonces se sumó la guitarra de los PB y formaron un triunvirato de alto vuelo mental, las gaseosas que había ido consumiendo hicieron su decantación natural, además el ambiente de interior ya lo empezaba a ensombrecer, y tambien esa nitro tan condiciada y negada para los que son "ortibas" le había llegado por fin, se fue en su viaje al baño y el ambiente sónico lo fue transportando en apacible viaje.
Cuando volvió ya estaba betado para volver a entrar y el ambiente acustico estaba mutando en la cruda amplificación de ese rock-kumbia que los caracteriza. Se quedó a un costado y entonces se dejó llevar, los escuchó como nunca, basicamente a la dupla a cargo de las voces; lejos el nerviosismo de un show en un club, cerca la confianza de tocar ante conocidos. Versiones dulcisimas y los demás Pibes Babylonia piboteando por ahi entrando y saliendo del stage, aportando el talento que sólo la energia de un circulo bien cerrado puede aportar. El contacto de sus dueños subió y cantó un tema ultra inédito, que vaya saber mi señor Luzbel donde habrá el escuchado. Y después una improvisación, o eso creía él, fluyendo en la total autorreferencialidad o la nafta para despertar mentes dormidas, porque a la mala onda de las intento se le contrapone el humor filoso que siempre parece decir "te banco".
Los instrumentos cambiando de manos y él acechando en su insoportable duda, entonces cuadró: el nagual en la bateria y el alfa en el bajo y la electroacustica libre, sus sentidos eyectados y el miedo de la adrenalina fluyendo, entró y un trueno le sonó en el marote: "pie en bateria". Que tocó? no lo supo, fluyó de seguro, el nagual chequeando sus notas y acordes y el alfa en su espalda como si dos soldaditos enfretaran a un batallón que los rodea para huntearlos. Lo unico que supo fue de ese terror primario que le marcaba no te envicies y que en un momento la canción llegó a parecerse a Cieguitos de los Twist, las manos manos arriba stylando bajo, las cuerdas de abajo sonando en primera viola y esa sensanción inestimable que produce tocar con alguien que la sabe mucho más que vos.
Entonces se bajó, que podía pensar? sexo con su mirror femenino? algo parecido, se quedó a un costado y siguio disfrutando, alentandolos pero en otro registro, no era un recital.
Y la quietud lo fue sumiendo en su FPS de capela, su alquimia de paso al otro lado y su fe en el shepper, hasta que no hubo onda para tocar, de a poco la escena se fue apagando y el sintiendo que ya no estaba ahi, que su alma solitaria debía seguir otro rumbo. Tomo la bloda y en su camino saludó, un lento viaje con esa fuerte contraposición entre placer y temor sabiendo que ella anda cerca, que el trucho te la chumba si te le paras, que ciertos deseos te acercan así como te alejan de ella.
El viaje fue largo y la sensación de cumplir le revelaba sus secretos y a la vez los de los que se cruzaba, espejos de otras existencistencias quizás, siempre cuidandose de los drivers y las malas irushas, cuando llegó a babylon decidio caminar, ellos rebotando en su cabeza por que claramente les había pedido: "no se vayan nunca" aunque me quemen. Caminó, leyendose en una vuelta jodida, tratando de no inquietarse por esas habituales señales. Cuando llego a la primera plaza que te corta el camino, ellas aparcaron bien a su vista y se bajaron, su tensión se disparó. La que le había servido la torta y una acompañante, se asustó pero envalentonado porque venía en alta se olvidó el cheq y el dato de la que si valia la pena en su riñonera pero les advirtió firmente: "les conviene que este", aunque también entendía que podían ser guardias de alguno de sus demonios o de una alfa talentosa a la que le había caído bien.

Entonces se encuchó, sólo pero entendiendo que era un regalo subir así y después irse sin problemas. Al otro día encaró la existencia de forma tranquila, el caminar sin amos todavía le reservaba un regalito más, al anochecer se conectó en la frecuencia de la mente y para su sorpresa estaba baby tóxica, había desaparecido de su vida y la había vuelto a extrañar prometiendo cosas ridiculas como no tirarle onda para inturnarse si la volvia a ver, una persecusión de fantasmas oscuros de esta ciudad cuadrada, ELLOS la habían vuelto traer finalmente, lo escuchaban y a la vez el andaba su propio camino invocandola porque a fin de cuentas era su musa cuando fluía en la frecuencia terro. Se encontraron y caminaron, pero cuanto le duró su promesa?: nada, sólo esa noche. Se vieron un par de veces más pero era imposible no desearla, jugó sus cartas y como siempre lo mando a suicidio, por suerte caminaba con su real familia y ellos lo sacaron de esa tristeza perpetua, pero para sus adentros tuvo que prometer: llevame capela de esquina si la vuelvo a buscar.

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